Tarta de Calabaza: Una Mezcla Culinaria de Culturas y Tiempo

Plato con una tarta de calabaza.

La comida es también un arte, una expresión creativa que forma parte de nuestra vida cotidiana. En la cocina, nuestras manos mezclan ingredientes para dar vida a nuevos sabores, o bien, para evocarnos recuerdos y traer esas memorias de vuelta a la vida. El poder de los sabores y olores es transportarnos al pasado, a esos momentos que vivimos con los abuelos, nuestros padres, la familia o nuestros amigos, compartiendo experiencias que permanecen grabadas en los aromas, los sabores y las tradiciones.

En esta entrada te comparto mucho más que una receta, te invito a conocer la historia de la tarta de calabaza (pay de calabaza), un postre que, aunque suele asociarse con el Día de Acción de Gracias en Norteamérica, tiene raíces más profundas y una mezcla de influencias que cruzan siglos y culturas. Aquí encontrarás una versión casera inspirada en las primeras recetas escritas en América, con un toque de brandy que honra esa tradición antigua y le da un sabor inolvidable.

La Calabaza y las Tres Hermanas

La calabaza es uno de los cultivos más antiguos de América que forma parte del trío agrícola conocido como las “Tres hermanas”, junto con el maíz y el frijol. Para los mexicanos, el pay de calabaza no suele relacionarse con un postre tradicional, ya que no celebramos el Día de Acción de Gracias como en Estados Unidos o Canadá. Sin embargo, es fascinante descubrir cómo los ingredientes que consideramos propios se entrelazan en historias culinarias de otras culturas. Esa historia tiene como protagonista a la calabaza, un ingrediente profundamente arraigado en las culturas de nuestro continente.

El Día de Acción de Gracias: Dos Países, Dos Festividades

El Día de Acción de Gracias tiene orígenes diferentes en Canadá y Estados Unidos, aunque ambos celebran el concepto de gratitud. Fue en Canadá, que celebró por primera vez en el continente americano la festividad conocida como cena de Acción de Gracias.

Esta celebración ocurrió en 1578, organizada por el explorador inglés Martin Frobisher en Newfoundland, para agradecer que llegó sano y salvo al Nuevo Mundo. Con el tiempo, gracias a las influencias de inmigrantes europeos, esta festividad se transformó en una tradición relacionada con la cosecha. Por esta razón, Canadá celebra el Día de Acción de Gracias el segundo lunes de octubre, alineado con su temporada de cosechas más temprana debido al clima más frío.

En cambio, el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos tiene sus raíces en 1621, cuando peregrinos y los indígenas Wampanoag compartieron una comida en Plymouth, Massachusetts, en señal de unidad. Aunque es posible que no haya tenido gran importancia en su tiempo, hoy se ha convertido en una de las festividades más significativas de Estados Unidos. Se celebra el cuarto jueves de noviembre, marcando el inicio de la temporada festiva en ese país. Aunque se llamen igual, estas dos celebraciones reflejan diferentes historias y contextos culturales.

(Para más información, consulta diffen.com).

El Origen de la Tarta de Calabaza 

En fin, en mi búsqueda por la historia del famoso y emblemático tarta de calabaza o pay de calabaza, me encontré con dos recetas que datan de los siglos XVIII y XIX que me inspiraron para recrear este postre tan clásico. La primera es por Amelia Simmons, quien en su libro American Cookery (1796) que presenta una receta que incluye leche, calabaza, huevos, melaza, allspice (pimienta de Jamaica) y jengibre. La otra es de The Virginia Housewife, escrito por Mary Randolph en 1836. Esta última presenta un “pudding de calabaza”,  más que un pay o una tarta como lo conocemos hoy, pero con ingredientes similares: calabaza, mantequilla, leche, jengibre, nuez moscada, azúcar y un toque de brandy, un detalle que me parece particularmente interesante.

Ingredientes del pay de calabaza

La Cocina, Una Mezcla de Sabores y Culturas

 Es mágico cómo ingredientes nativos de América, como la calabaza y la pimienta dioica (o pimienta gorda, como dice mi mamá), se combinan con elementos de otras partes del mundo. El jengibre y la nuez moscada provienen del suroeste de Asia, los productos lácteos y la harina de trigo tienen sus orígenes en el Medio Oriente. Nuestra comida, como nosotros mismos, es una mezcla constante de culturas. Los encuentros históricos, aunque muchas veces dolorosos, dejaron también una herencia culinaria.

Es inevitable reflexionar sobre cómo las conquistas, migraciones e intercambios culturales han dado forma a las tradiciones culinarias que conocemos hoy. La pregunta queda abierta: ¿quién conquistó a quién? Ingredientes como el tomate mesoamericano son ahora esenciales en la cocina italiana, la papa andina es un pilar de la gastronomía rusa y la cocina estadounidense es un mosaico evolutivo de influencias migrantes y locales.

La comida no solo cuenta historias, sino que conecta el pasado con el presente, manteniendo viva la memoria a través de olores y sabores. Hoy, al preparar una tarta de calabaza, o como decimos en México, un pay de calabaza; esa combinación de sabores tan distantes nos conecta con siglos de tradiciones. Ese aroma de pumpkin spices y el sabor del pay de calabaza son el resultado de siglos de encuentros, intercambios y adaptaciones. Es un recordatorio de que las tradiciones culinarias siempre están en movimiento, evolucionando y creando nuevas conexiones.

 Aunque las recetas modernas han evolucionado para tener menos líquidos y una textura más densa. Esta receta que presento es diferente a las recetas originales, quise hacer una combinación de estas dos recetas históricas, recuperando el toque de brandy que se ha dejado fuera en las recetas actuales.

Si quieres preparar esta tarta desde cero y aprovechar al máximo el sabor de la calabaza, te invito a descubrir cómo hacer tu propio puré casero. Es simple, natural y le da un toque aún más especial a tu receta. Puedes encontrar la guía completa aquí:

Pay de Calabaza

5.0 from 1 vote
Course: PostreCuisine: EstadunidenseDifficulty: Fácil
Porciones

6

porciones
Tiempo de preparación

10

minutes
Tiempo de cocción

1

hour 

Ingredientes

  • 2 tazas 2 de puré de calabaza

  • 1 taza 1 de leche evaporada (Alternativa: 3/4 de taza de leche entera y 1/4 taza de mantequilla derretida)

  • 1/4 taza 1/4 de brandy (Opcional: reemplaza por 1/4 de taza adicional de leche evaporada)

  • 2-3 2-3 huevos

  • 3/4 taza 3/4 de azúcar morena

  • 1/2 cucharadita 1/2 de sal

  • 1 1/2 1 1/2 cucharadita de canela molida

  • 1/2 1/2 cucharadita de jengibre en polvo

  • 1/2 1/2 cucharadita de nuez moscada

  • 1/2 1/2 cucharadita de pimienta gorda molida

  • 1 1 base de pie (hecha en casa o comprada)

Procedimiento

  • Precalienta el horno a 190°C (375°F).
  • En un recipiente grande, mezcla el puré de calabaza, el azúcar y todas las especias.
  • Gradualmente incorpora la leche evaporada y el brandy.
  • Agrega los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Si la mezcla es suficientemente espesa con dos huevos, no agregues el tercero.
  • Vierte la mezcla en la base del pie, llenándola hasta 5 mm del borde. Si sobra mezcla, hornéala aparte en un molde pequeño.
  • Hornea por 50-60 minutos, o hasta que el relleno esté firme pero ligeramente tembloroso en el centro.
  • Deja enfriar por 1-2 horas antes de servir. Disfrútalo con crema batida o helado de vainilla.

Did you make this recipe?

Tag @mealnstock on Instagram and hashtag it with

Like this recipe?

Follow @Meal&Stock on Pinterest

Join our Facebook Page!

Follow us on Facebook

Explora otras recetas